La Casa Rotaria de R.C. Maldonado
El 11 de octubre de 1972 la rueda rotaria del Rotary Club Maldonado se reunió por primera vez en su Casa Rotaria.
Días antes, el 4 de octubre de 1972, en sencilla pero emotiva ceremonia, la Comisión de Obras entregaba las llaves de la Casa a la Comisión Directiva del Club, presidida por el inolvidable compañero Febe Batista.
¡El sueño se convertía en realidad!
La Casa Rotaria estaba pronta. ¡Pero si de eso se trata Rotary… convertir los sueños en realidad! La esperanza en acción, al decir de don Joaquín Serratosa Cibils, primer uruguayo en desempeñar orgullosamente la Presidencia de Rotary International. En 1969, merced la gestión de socio Carlos Rodríguez –ingeniero agrimensor- que se desempeñaba al frente de la Dirección de Catastro Departamental, se ubicó y seleccionó un terreno de propiedad municipal, y de privilegiado futuro, sobre la avenida Roosevelt. Se concretó entonces el ansiado contrato de comodato entre la Intendencia de Maldonado y nuestra institución. Nuestro compañero EGD Héctor Mario Vila, arquitecto de profesión, puso todo su empeño, solvencia profesional y dedicación en la confección de los planos “…un ambicioso anteproyecto que sería la base del trámite presentado luego para iniciar las obras de una primera etapa, lo entonces considerado imprescindible: salones en planta baja y alta, cocina, baños y pocas cosas más. Una vistosa escalera exterior, bajo un amplio alero, fue por años la única conexión entre ambos niveles…” (Revista 70 Aniversario pág. 15).
Una reseña confeccionada para la publicación realizada con motivo de los cincuenta años de nuestro Club, nos permite conocer algo de la rica historia de su construcción. Dice así: “…Nuestro Club con treinta y dos años de existencia vivía en un constante peregrinaje de una a otra institución, que circunstancialmente nos albergaba en su seno con la mejor buena voluntad, pero… anhelábamos profundamente tener nuestro propio hogar. Sentíamos la necesidad imperiosa de centralizar con comodidad nuestra ACTIVIDAD de SERVICIO en la COMUNIDAD. Tantos años de accionar Rotario habían hecho de nosotros un Club con aptitudes y condiciones de emprender aquella aparentemente quimérica empresa o cualquier otra de singular trascendencia. Así fue que, “como camino se hace al andar”, aprisionando tantas inquietudes y con un haz de férreas voluntades, la Directiva del período 1969/70 encendió el fuego. Obtuvo de las autoridades Municipales la cesión de un hermoso predio en el que, aunando esfuerzos, futuras Juntas directivas dejarían su huella hasta llegar a obra tan singular. El reto estaba en pie, era necesario continuar; y en el período 1970/71 los cimientos de la Casa Rotaria asomaron vigorosos entre los árboles.
En el año rotario 1971/72 los techos ya competían con las copas de los pinos.
En julio de 1972 la lucha continuaba, se redoblaron los esfuerzos y ¡como un sueño! El 11 de octubre de ese mismo año la Comisión de Obras hace entrega a la Junta Directiva de esa, nuestra casa, la casa de todos los rotarios, la casa desde la que ayer, hoy y siempre nos proyectamos hacia nuestra comunidad para brindarle todos nuestros esfuerzos.
¿Por qué esta reseña histórica no menciona nombres? No, no es olvido, es el intento de no herir la modestia de algún compañero o no cometer la injusticia irreparable de omitir al más modesto, que con sus limitadas posibilidades brindó su apoyo espiritual. Pero sí podemos decir que la colectividad entera colaboró ampliamente, por eso para ellos es nuestro eterno agradecimiento y la promesa de retribuírselos día a día con nuestro accionar rotario.” Cabe recordar que en la construcción de la Casa Rotaria trabajaron convictos de buena conducta, que eran trasladados diariamente desde la Cárcel por nuestros compañeros rotarios. Febe Batista, inolvidable rotario que brindó lo mejor de si a nuestro Club, recordaba “…en el año 1968 me integré a un Comité que se denominaba Pro-Casa Rotaria. En 1969-70 se consiguió el terreno; en 1971-72, se iniciaron las obras, en 1972-73, en mi Presidencia, se inauguró la Casa Rotaria. El sueño de mi vida: tener un lugar propio para reunir el esfuerzo de muchos compañeros rotarios. Seguí trabajando en el Comité de Administración de la Casa Rotaria y se integraron los Rotary Clubes de Punta del Este y de Maldonado Este (…) Un día Mario Ceriani, Luis Barragán y yo redactamos un reglamento que se llamó Comité Casa Rotaria que estuvo vigente hasta 1995-96, es decir 26 años que viví y compartí Casa Rotaria; lugar en el cual han desarrollado tantos y tantos proyectos y obras sociales. Para mí es un placer haber podido contribuir a realizar dicha Casa que servirá a las futuras generaciones de rotarios…” (Revista 60 Aniversario). Y la historia de nuestra Casa Rotaria continúa en la Revista 70 Aniversario: “...Desde entonces, la Casa no ha dejado de crecer y ser mejorada. La primera etapa construida del más ambicioso proyecto original necesitaba ser complementada para mejorar la funcionalidad del conjunto, especialmente en lo que refiere a una vinculación interior entre la cocina y el salón superior, hasta entonces servido por un motacargas. En 1994 nuestro consocio Arq. Nelson Reimundo diseña y tramita los permisos para construir la ampliación posterior: escalera interna, despensa, depósito y “office” para atender a la planta alta en funciones de comedor. Y desde allí en adelante, muchas mejoras y renovaciones se han hecho en la casa (…) Así, por ejemplo, se informa sobre la construcción y sucesivas ampliaciones del local posterior hoy denominado “Parrillero de Febe”. En el jardín, una cancha de bochas ya fuera de uso ha cedido posiciones a juegos infantiles y comodidades para “pic-nics”. En el correr del 2002 el siempre recordado Antonio Pagliuca proyecta y dirige la redecoración del salón superior de la Casa. Durante el Ejercicio 2004-05 el consocio Arq. Nelson Reimundo presenta el anteproyecto para el cierre del “porch” abierto frontal. Estima el costo de las obras en el orden de los U$S 5.000. En el 2005 mejoras en baños, pinturas en general, nuevos pavimentos en el retiro frontal y en la escalera exterior, renovación de la instalación eléctrica y artefactos lumínicos, reparación de juegos infantiles. En el correr de los años 2007 a 2009, pinturas, emprolijamiento de cercos del predio, hidrolavado de fachadas, mejoras y reparaciones en la cocina, colocación de rejas en las aberturas de planta baja en usufructo de una generosa donación proveniente del Club de los Balleneros. Y la lista habrá de seguir, continuaremos “haciendo camino al andar”. Nos espera el cierre vidriado del “porch” delantero con el cual no sólo libraremos a la escalera frontal de las inclemencias del tiempo, sino que se abrirá la interesante posibilidad de una acogedora pequeña sala de estar y un buen local para la Secretaría del Club, lógica custodia de su historia…” La Casa Rotaria constituye un ámbito de trabajo rotario, es así que los socios de los tres clubes de la zona (Maldonado, Punta del Este y Maldonado Este) se reúnen semanalmente a cumplir con sus reuniones de trabajo. Asimismo, con renovados bríos propios de su edad, también semanalmente se dan cita en nuestra Casa los jóvenes interactianos y rotaractianos. Nuestra sede ha albergado las más diversas actividades rotarias a nivel distrital. Se han realizado innumerables actividades de proyección social y cultural en beneficio de la comunidad. Ha sido un lugar de encuentro y confraternidad permanente.
Nuestras puertas permanecen abiertas a toda la sociedad para cumplir a cabalidad la misión rotaria: DAR DE SI SIN PENSAR EN SI.
Fernando Cairo
Nota Editorial: Fernando Cairo es socio del Rotary Club Maldonado, ejerce su profesión como Abogado y también como Sub-Director de Cultura.
EGD 498, ex Interactiano y Rotaractiano